Ajusta la privacidad y los filtros en tus perfiles de redes sociales para estar más seguro de que las fotografías de tus hijos que subas sólo las verán aquellas personas que tu desees. También recuerda, que:
- En la mayoría de las redes sociales, una vez que subes una fotografía, pasan a ser de dominio público y ya es prácticamente imposible eliminarlas.
- Si quieres compartir fotografías de tus hijos con la familia y amigos, ¿por qué no usas el correo electrónico? Es más directo, discreto y seguro que si las publicas en las Redes Sociales y además tu familia y amigos las pueden descargar.
- Evita el exhibicionismo continuado y masivo de los niños. Hagamos estas reflexiones: ¿crees que es necesario subir tantas fotografías y con tanta frecuencia de los niños a las redes sociales?, ¿cuándo ellos lo hagan por su cuenta en sus perfiles sociales también nos va a parecer bien? Pensemos en dar ejemplo.
- Si haces las fotografías de tus hijos con dispositivos digitales (cámara digitale, Smartphone o tablet), recuerda que las fotos están geolocalizadas por el GPS, asegúrate de desactivar esta función. Y piensa que cualquier persona puede rastrear los metadatos de la fotografía y conocer el lugar exacto donde se tomó, incluso la fecha y hora.
- Protege la integridad moral de tu hijo. No publiques una foto de él que ahora puede resultar graciosa y que comprometa su futuro o dañe su autoestima frente a los demás. Los niños, a veces, son muy crueles. Y no olvides la facilidad y rapidez con la que se puede viralizar y expandir por las redes sociales.
- Exige a todos tus familiares y amigos que no publiquen en sus redes sociales, fotografías de tu hijo sin tu consentimiento expreso y el del otro progenitor.
- Nunca identifiques al menor con su nombre y apellidos. Llámale sólo por el nombre o su apodo.
- Supervisa con detenimiento las imágenes que vas a subir a las redes sociales. No publiques fotografías donde se pueda reconocer tu vivienda o deducir donde vives, el colegio, matrículas de coches, … A veces damos pistas sin querer sobre nuestras rutinas a posibles ladrones, acosadores o incluso pederastas.
- Nunca des datos de horarios del menor, ni de sus actividades extraescolares, hobbies, … Cuanta menos información des sobre los lugares que frecuenta y sus horarios será mejor.
- Jamás publiques una fotografía de tu hijo desnudo. Para nosotros puede parecer una fotografía inocente, pero hay gente (porque no son personas) con otra mirada y que además le pueden dar usos pornográficos. Parece de sentido común, pero es increíble la cantidad de fotografías de niños desnudos en las redes sociales.
Realmente no tenemos derecho a publicar ninguna fotografía o información de nuestros hijos en las redes sociales y así lo defienden muchas leyes a nivel mundial en los países desarrollados. Nunca debemos olvidar que: “La vida privada del niño es del niño, no de sus padres” Y si en las fotografías hay niños menores que no son tus hijos y son hijos de amigos y familiares debes tener el consentimiento escrito de sus tutores legales (normalmente son los padres), no sólo para tomar la fotografía, si no para subirla también a las redes sociales.
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